Aunque el calor apriete en pleno verano, siempre hay una serie de pautas que podemos llevar a cabo en el hogar para ahorrar energía y reducir el importe de la factura de la luz sin prescindir del uso de este maravilloso aparato.
Son medidas básicas, que van desde no superar la temperatura media recomendada, hasta escoger el equipo con las características adecuadas para nuestro hogar.
- El aparato debe ser eficiente
Adquirir un electrodoméstico con un indicativo A+++, supone hasta un ahorro del 40% en el consumo de energía. Es uno de los aspectos fundamentales que debemos tener en cuenta a la hora de adquirir un equipo de climatización. Dos aspectos muy importantes en la elección son la potencia y el nivel de ruido.
- Modo eco
Todos los equipos que tengan la opción de sistema eco pueden generar un significativo ahorro energético y económico.
- Temperatura
En cuanto a la temperatura, está extendida la creencia de que la ideal son los 20-21 ºC. Sin embargo, el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) recomienda que en verano el cuerpo debe adaptarse a la temperatura ambiente, vistiendo con ropa ligera el termostato tiene una temperatura ideal de 26 grados.
- Hogar preparado
No todo va a depender de nuestro equipo de climatización. En el hogar también hay factores que contribuirán a mantener las estancias más frescas durante los meses de verano: un buen aislamiento especialmente en las ventanas es ideal para mantener una temperatura estable.
- Mantenimiento del equipo
Debemos atender a las instrucciones de los fabricantes para mantener los equipos en el mejor estado posible. De este modo, serán más eficientes y tendrán una vida útil mucho mayor. Los filtros son los elementos más importantes a tener en cuenta, debemos limpiarlos en los cambios de estación.
- Instalación
La instalación debe dejarse en manos de profesionales para evitar posibles errores que suframos a largo plazo. Es importante tener en cuenta que no debemos situar el equipo cerca de bombillas, televisores o en una zona en la que le dé el sol directamente. Además, no es recomendable cubrir el compresor exterior, lo ideal es que tenga las entradas y salidas de aire sin obstáculos.