Actualmente existe un gran abanico de posibilidades en cuanto a la elección de un sistema de calefacción u otro. Si necesitas una nueva instalación, te detallamos las ventajas e inconvenientes de los principales tipos utilizados en España para que puedas orientarte acerca de cuál es el mejor se adapta a tus necesidades:
Chimeneas o estufas
- Ventajas
Son ideales para las zonas rurales como complemento en una zona concreta del hogar (por ejemplo para el comedor). Es el sistema más barato, ya que la madera es el recurso más asequible. Además, es un método sostenible con el medio ambiente. La combustión de madera genera emisiones menos nocivas que la combustión de energías fósiles.
- Inconvenientes
El principal inconveniente de este sistema es que genera un gran gasto en su mantenimiento, y que su rendimiento es inferior que los sistemas de agua caliente actuales. Además, necesitaremos un espacio extra en el que almacenar la leña o los pellets.
Radiadores de agua
- Ventajas
Son muy comunes por su gran facilidad de instalación, es un sistema cómodo y recomendable para viviendas grandes en las que el consumo es alto. Se trata de un sistema con un alto rendimiento, y muy eficiente.
Se trata del sistema que mejor conserva el calor residual, y es un buen sistema también para zonas rurales.
- Inconvenientes
En zonas rurales no se dispone de tanto gas corriente, se necesita por tanto un depósito de de gas o gasóleo. Además, no es el mejor sistema si atendemos a la contaminación atmosférica.
Radiadores eléctricos
- Ventajas
Es un sistema recomendado para viviendas pequeñas en las que el consumo no es muy alto. Su instalación es fácil y requiere un mantenimiento sencillo. Especialmente en las zonas urbanas la red eléctrica garantiza el suministro, por lo que es un sistema estable y fiable.
- Inconvenientes
Se trata del sistema más caro de los tres, además no es sostenible: la electricidad se produce a partir de la combustión de energías fósiles, lo que provoca emisiones de Co2 a la atmósfera.