Aumentar o reducir la temperatura de un espacio determinado. Es la función básica de un termostato, uno de los modelos más novedosos en cuanto a climatización del hogar. De los primeros modelos con ruedas analógicas con los que regulabas la temperatura, hemos pasado a versiones digitales con la incorporación de una pantalla en que descendías o subías la temperatura a través de botones y teclas.
Ahora, la tecnología continúa avanzando y del modelo digital llegamos a los nuevos modelos de termostatos inteligentes o ‘smart thermostat’ con el que, a través de determinados algoritmos, este dispositivo comprenderá tus hábitos de temperatura, confort y eficiencia, favoreciendo, además, un uso de la energía sostenible y racional. Las ventajas que presentan es el conocimiento exacto de lo que estás gastando en cada momento, lo que te permitirá optimizar tu ahorro energético. Puesto que el gasto en climatización tiende a suponer hasta un 40% del consumo total energético de una casa, estos detalles te ayudarán a llevar este control que puede marcar una diferencia importante en el resultado final.
También, como todo dispositivo ‘smart’, está conectado a tu Smartphone y tablet, por lo que podrás controlar la temperatura a través de ellos así como programarla y modificarla independientemente de dónde te encuentres. Un termostato wifi te ofrece la posibilidad de personalizar todos los factores que quieras proporcionando una opción de exclusividad que no disponías en los tradicionales termostatos ni en el digital.
