Una de las problemáticas más habituales que genera el aire acondicionado es el mal olor que en ocasiones se respira en las estancias donde se instala. Si alguna vez te has preguntado por qué huele tan mal, y principalmente, cómo hacer para que deje de oler así, te explicamos el origen y la manera para que puedas disfrutar de un clima refrigerado en hogar o lugar de trabajo sin tener que respirar malos olores.
Para empezar, hay que tener en cuenta que el aire acondicionado por sí mismo, no genera olores. Por lo que se trata de los diferentes elementos de los que consta la máquina y su situación los que causan ese mal olor. Existen tres situaciones que son las que, por lo general, lo provocan: suciedad en el interior del aparato (filtros, ventilador o intercambiador), el desagüe, o el movimiento del aire.
La acumulación de suciedad y humedad en filtros, intercambiador o en la bandeja del desagüe son los que producen ese olor desagradable, ya que por sí solos, tampoco suelen oler. Lo que sucede, es que al aspirar el aire, si se encuentra con estos elementos en mal estado, al encenderlo y expandirse por la estancia genera la sensación de mal olor y de que este proviene de la máquina. Por ello, mantenerlos limpios y en buen estado es determinante para garantizar que la estancia donde esté el aparato de aire acondicionado no huela mal. Esto se incluye en la limpieza que debemos llevar una vez terminada la temporada de verano, que es el periodo en el que más humedad se instala en el interior del aire acondicionado. Asimismo, durante el invierno, se debe poner de vez en cuando, el aparato en modo ventilación algunas horas y evitar la acumulación de hongos. De esta manera, conseguiremos que cuando volvamos a encenderlo el siguiente verano esté en buenas condiciones.
En el caso de que sea el desagüe el causante del mal olor, recomendamos, o bien colocar una llave de paso en él, abriéndola en verano y cerrándola en invierno, o comprar uno nuevo.
Por último, el movimiento del aire en mal estado es el punto más complicado de solucionar. Se da solo en los tipos de aire acondicionado que no cuentan con conductos de retorno, es la mayoría de los casos, y aspiran fugas de mal olor que acaban en nuestra habitación. Ante esta situación, el arreglo proviene de eliminar el foco del mal olor.
