Durante el pasado año 2016 se instalaron un total de 662.702 equipos de calefacción, lo que supuso un gasto de 305 millones de euros. En total, supone un 6,65% más que en el año 2015. Estos datos son excepcionales para el sector, ya que las ventas domésticas experimentaron un crecimiento del 45,6%, el mayor en los 20 años que la AFEC (Asociación de Fabricantes de Equipos de Climatización) lleva analizando los datos de compra y venta.
Tras dos años consecutivos de crecimiento y unas buenas previsiones de ahora en adelante, no debemos perder los datos y referencias anteriores, ya que en 2012 las ventas apenas llegaron a un tercio de lo que se vendió en 2005.
En el año 2015 hubo dos motivos que favorecieron el repunte de las ventas, la mejoría económica y las excepcionalmente altas temperaturas estivales. Hubo incluso ciertos fabricantes que se quedaron si stock.
Hay un fenómeno que cabe destacar: desde 2015 también es notable el aumento de venta de equipos de bomba de calor, constituyendo actualmente el 90% de las ventas. Esto ha ocasionado también que las ventas se adelanten incluso a los meses de febrero y marzo.
Por tanto ya no solamente influyen las altas temperaturas de cara a la compra de climatizadores, sino que ahora también mucha gente se plantea instalar una bomba de calor para caldear la vivienda.
¿Qué previsiones hay de ahora en adelante?
Parece que las ventas seguirán creciendo. La mayor parte de la gente que tiene un equipo de aire acondicionado en su casa desde hace años es probable que esté pensando en cambiar. Uno de los grandes motivos es la normativa europea que prohíbe que se recarguen los modelos que usan R-22, un gas que incluye cloro y que es causante del efecto invernadero. Cualquier equipo de más de 15 años es muy probable que lo utilice, por lo que si tiene una avería o necesita una recarga, el problema no podrá ser solucionado.