¿Qué te viene a la mente al escuchar la palabra domótica?
Probablemente te imagines un hogar en el que al despertar, con un par de palmadas se levanten las persianas y la cafetera se encienda sola. Sin embargo esta estampa futurista de la tecnología en el hogar no es del todo así.
La realidad de la domótica es más tangible y por suerte mucho más cercana al bolsillo de todos. De hecho, un simple adaptador en venta en Amazon por 35€ es la llave que abre las puertas al ahorro en la factura energética de nuestra vivienda.
Su funcionamiento es muy sencillo:
Párate y analiza todos los enchufes que se encuentran en tu hogar permanentemente conectados y alimentando dispositivos las 24 horas del día sin necesidad. Probablemente casi todos los equipos electrónicos se encuentren en modo stand-by. Si combinamos esta situación con la posibilidad de que la mayor parte de los días pasemos el día en el trabajo y lleguemos a casa prácticamente a la hora de cenar, nos encontramos con la situación de que todos nuestros equipos conectados a la corriente han estado consumiendo energía sin una necesidad real.
Este tipo de gastos podemos pensar que son marginales, pero si hacemos cálculos y lo sumamos a nivel anual las cifras son llamativas: es posible que en un hogar medio el gasto anual de los equipos en stand-by sea de 90 euros.
Este gasto se ve de forma más clara en dispositivos con un alto consumo energético, como es el caso de calderas, especialmente si son eléctricas. ¿Qué necesidad tenemos de mantener el agua caliente las 24 horas del día si nos duchamos únicamente por la mañana o por la noche?
Pero, ¿cómo lograr una automatización en los hábitos para lograr pagar menos a fin de mes?
Es en este punto en el que entran en juego los enchufes programables, un producto muy popular que podemos encontrar por ejemplo en Amazon. A través de una App móvil, podemos programar el encendido y apagado de los dispositivos conectados. Cada usuario puede instalar sin problema el enchufe conectado en aquellos dispositivos que tienen un elevado nivel de consumo (calentadores, calderas…), o en las regletas que tengan varios equipos conectados.
Si eres un amante de los datos, encontrarás en este tipo de dispositivos todo un filón. Son capaces de registrar el consumo eléctrico real y el “residual”, de tal forma que somos más conscientes del gasto y del ahorro al que podemos aspirar si modificamos nuestras costumbres del día a día.
¡Aquí puedes ver su funcionamiento al detalle!