El Agua Caliente Sanitaria (ACS) es agua destinada a un consumo humano que previamente ha sido calentada. Su consumo es para usos sanitarios (baños, duchas…) o usos de limpieza (lavadora, lavavajillas…).
Esta agua procede normalmente de la instalación de agua del edificio, para conseguirla, se necesita bastante cantidad de la energía total del consumo, entre el 20% y el 40%, por ello, es necesario que las conducciones y los depósitos estén correctamente aislados térmicamente, con el objetivo de minimizar las pérdidas de energía.
Las principales ventajas del agua caliente sanitaria (ACS) son las siguientes:
- Ahorro económico: la instalación de ACS en tu hogar va a conseguir un importante ahorro en las facturas eléctricas.
- Costes mínimos de instalación: a estos ahorros económicos, tenemos que sumarle que la instalación de la unidad que consigue el ACS para tu hogar es muy económica.
- Seguridad: dicho sistema garantiza la seguridad en tu hogar, ya que, no utiliza gasóleo, gas o cualquier otra sustancia nociva.
- Mayor eficiencia energética: si obtenemos ACS con energías renovables la eficiencia energética está garantizada.
- Mantenimiento sencillo: su mantenimiento es muy sencillo, ya que, no precisa de las acciones que de mantenimiento de las calderas convencionales.
- Mejora el nivel de confort: todas estas ventajas, hacen que el nivel de confort aumente.
Cuál es la mejor opción para obtener agua caliente sanitaria:
- Calderas: adecuadas para usos industriales, comunidades de vecinos o grandes locales donde tengan un gran consumo de agua caliente constante.
- Bomba de calor: es la opción más ecológica, por lo que además de reducir el consumo de energía, te permite ahorrar.
- Termos eléctricos: funcionan con electricidad y acumulan de 50 a 100 litros de agua caliente.
- Acumuladores: permiten usar varios tipos de energía al mismo tiempo.
En Low Cost Por el Aire, contamos con cada una de las anteriores opciones, para que encuentres aquella que mejor se adapte a las necesidades de tu hogar o lugar de trabajo.
